En plena meseta castellana, en la provincia de Valladolid, asoma en lo alto de un
altozano, casi de manera tímida, la antigua villa medieval de Urueña. Está rodeada casi totalmente por murallas, por lo que cuando nos vamos acercando desde la carretera hacia este lugar, su estampa, como un islote en un mar de llanuras, ya proporciona al viajero curiosidad y ganas por traspasar sus murallas y adentrarse en ella para conocerla.

Aunque es un municipio pequeño y con pocos habitantes, aparte de sus casas solariegas, torres, castillo, murallas por las que incluso se puede pasear y disfrutar de las maravillosas vistas de los campos de Castilla, Urueña está catalogada como “Villa del Libro”, siendo una nueva y atractiva forma de turismo cultural, siendo la primera que se generó en España, pues en otros países de Europa también existen municipios así.
Con este tipo de proyectos se quiere proporcionar una dinamización económica, cultural y artística a partir de las numerosas librerías especializadas allí establecidas en las que podemos comprar libros de distintas temáticas. Además también se organizan en la Villa durante todo el año numerosos y variados eventos culturales ligados a la literatura y el mundo de los libros, como talleres de encuadernación, caligrafía antigua o tertulias literarias y otros eventos, en los que pueden participar tanto escolares como especialistas, profesionales o cualquier persona o viajero al que le guste disfrutar del mundo de los libros y su cultura.

Además, la localidad cuenta con una gran joya, el valiosísimo centro de investigación y Museo Etnográfico Joaquín Díaz (gran etnógrafo de reconocido prestigio) y que está ubicado además en una gran casa solariega donde podemos disfrutar y aprender mucho de todo nuestro folclore, costumbres y tradiciones populares. Podemos ver por ejemplo en el museo distintos instrumentos musicales, grabados, etc. Es un lugar muy recomendable para no perderse.

Además Urueña cuenta con un Museo de Campanas, que por su originalidad es una visita muy singular que el viajero no tiene que perderse. Reúne más de veinte piezas antiguas y son de gran belleza.

Visitar Urueña es una experiencia especial en la que además de encontrase con un lugar que ya por su fisonomía nos envuelve de esencia medieval y belleza artística, y paisajística castellana, es una oportunidad para disfrutar de su otro carácter alcanzado actualmente entorno al mundo de la cultura de los libros.

Roberto Bernal